jueves, 24 de julio de 2008

martes, 22 de julio de 2008

El Primer Peronista


Orden General del 27 de Julio de 1819
Compañeros del exercito de los Andes. ...La guerra se la tenemos de hacer del modo que podamos: sino tenemos dinero, carne y un pedazo de tabaco no nos tiene de faltar: cuando se acaben los vestuarios, nos vestiremos con la bayetilla que nos trabajen nuestras mugeres, y sino andaremos en pelota como nuestros paisanos los indios: seamos libres, y lo demás no importa nada......Compañeros, juremos no dejar las armas de la mano, hasta ver el país enteramente libre, ó morir con ellas como hombres de corage.
Jose deSan Martín.
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lunes, 21 de julio de 2008


La traición de los hombres honestos

Por Claudio Zeiger
Quizá por un tiempo, Julio Cobos se convierta en el héroe de la antipolítica, el reino de los que creen que la moral y la política son dos esferas no sólo autónomas sino irreconciliables y que preferirían ser gobernados por una monarquía elegante o por los éticos médicos sin fronteras a los políticos. La ecuación es inmejorable. Para no traicionar su corazón, el vicepresidente “traicionó” los códigos de la política. Si podemos abstraer por un momento su decisión del conflicto por la 125, si se acepta que votó por una convicción y que esa convicción nació de la necesidad del diálogo y el consenso (bandera que, cabe aclarar, le pertenece a uno de los sectores en pugna, la Mesa de Enlace, precisamente el sector que proclamó pero nunca buscó ni el diálogo ni el consenso), podríamos decir con la revista Contorno y la pluma de Ismael Viñas, que estamos frente a “la Traición de los Hombres Honestos”. Cobos dice que lo juzgará la historia, pero en realidad lo estamos juzgando nosotros, que aún no somos historia, momento a momento. Ya hay “cobosmanía” y “cobosfobia”. Curiosamente, hasta el momento en que se escriben estas líneas, nadie ha puesto en duda la figura de Cobos como la de un “hombre honesto”, un radical clásico que no habría evolucionado, como su partido, hacia el más rancio conservadurismo provincial sino que se habría instalado en una posición de progresista del interior, o, en otros términos, un radical K. O, agregaría yo, un compañero de ruta reformista. Porque intuyo que después del conflicto que de una forma o de otra llega a su fin, vamos hacia la conformación de un bloque conservador que se enfrenta a un gobierno reformista precisamente para bocharle las reformas. El problema es que el bloque conservador llegó a morder los tobillos del gobierno reformista. Así, me parece, quedó la cosa.
Sobre esta configuración se agrega toda la discursividad atronadora de estos últimos cuatro meses, con sus marcas salientes de racismo y clasismo (clasismo en el peor sentido, se entiende) casi inéditos. Y en este campo discursivo y como colofón de la semana que pasó, se ubica el voto de Cobos, anunciado eufemísticamente como “un voto que no es positivo”. Podría pensarse que ese voto en nombre del consenso y el diálogo fue la réplica del otro hecho trascendental de estos días, que quedó curiosamente opacado por el Cobos affaire: una multitud en la calle, partida en dos, fue tapada por la sombra de un solo hombre.
Ahí –en esta intersección de multitud y Hombre solo en la madrugada–- creo que reside la clave del presente y del futuro. El voto del hombre honesto es la expresión condensada de una forma apolítica de hacer política, con la bandera argentina y el celular, con la indignación moral y la convocatoria cívica. No sé si en términos estrictos existe aún la oligarquía, pero la burguesía asentada en la prosperidad económica sí que existe y se viene manifestando hace más de 120 días para decir que no quiere que el Gobierno que les dio el crecimiento económico les imponga un estilo o, si se quiere, una estética, a la que rechazan visceralmente. Y ese estilo, esa estética, no es sólo la mentada “confrontación”: es la política expresada en términos históricos de militancia. Lo que se confrontó en las calles el día previo al nacimiento de Cobos, fue la política apolítica y la política militante. El silencio y el ruido. Y no lo voy a decir en los términos estrechos y un tanto cómodos, si se me permite, de los que mentan al gorilismo a cada instante. No se trata meramente de peronismo y antiperonismo (fórmula que obviamente está incluida pero no es decisiva).
Esa tarde tan soleada del invierno, la militancia como concepto y modo de entender la política (con sus errores, limitaciones y viejas mañas incluidos) vivió unas horas tan gloriosas que no extraña que suenen a final de época. Pero no debería ser tan grave.
El voto de Cobos, el hombre honesto de la moral media, cristalizó los valores de la política apolítica que existe y demostró que puede organizarse en un finde y mediante el celu. Creo que la militancia es el único camino que queda, y que su recomposición a todos los niveles –sindical, político, estudiantil, cultural e intelectual– es una tarea colectiva. La única condición es no defraudarla, no traicionarla.
Ni en nombre de la honestidad ni en nombre de la ciega lealtad.

domingo, 20 de julio de 2008

¿Contradicciones inentendibles o entendibles? El odio al Peronismo

En los últimos meses los argentinos nos hemos enfrentado a una crisis política muy llamativa, donde un gobierno elegido por elecciones democráticas tomo una decisión de gravar con retenciones a las exportaciones de productos agropecuarios de soja y girasol.
A partir del 11 de marzo comenzó un lock-out agropecuario que llego a unir a 4 entidades agrarias, dos de las cuales enfrentadas históricamente como la federación agraria se unía a la SRA.
Este conflicto agropecuario finalizo el jueves 17 de julio con el voto en contra del vicepresidente Julio Cleto Cobos en la cámara de senadores a la aplicación de retenciones móviles. A partir de este suceso surgió otra idiotez más en nuestra sociedad, una idiotez muy contradictoria, mucha gente contenta por la decisión de Cobos.
En diciembre del 2001 la gente salía a las calle al grito ¡¡¡Hooo/que se vallan todos/ Que no quede ni uno solo!!! La argumentación de este cántico era que los políticos defraudaban a sus votantes diciendo una cosa y haciendo otra, ¿se acuerdan de Salariazo y revolución productiva de Menem? Y salariazo nunca apareció y la revolución productiva se tradujo en la destrucción de lo que quedaba de la industria nacional.
Ahora hay algo que no entiendo ¿Por qué Cobos es un político modelo?, se postula en una formula que establece retenciones, ósea dé alguna forma diría; si me votas como vicepresidente entre tantas cosas voy aplicar retenciones a la producción agropecuaria, y en el momento de aplicar las retenciones vota en contra. ¿Es un político modelo? Dijo una cosa para que lo voten e hizo otra, digamos defraudo a un 45 por ciento de votantes entre los que me encuentro. Luego escuche decir que había que felicitarlo por tener un pensamiento independiente de la presidenta, ¡¡¡Muchachos!!! Si queres tener un pensamiento independiente, no te postules como vicepresidente dentro de un proyecto, si no estaba de acuerdo, andante a otro partido político y punto ¿para que se postulo como vicepresidente en un proyecto político en el cual no estaba de acuerdo? No hay que estar contento, es algo muy malo lo que hizo Cobos, tanto si sos peronista como si sos de otro partido, dijo una cosa para que lo voten e hizo otra.
Otra Pregunta que me hago, los que somos oficialista del gobierno de la presidenta Cristina cada ves que hablamos con alguien nos tratan de ignorantes, que la presidenta nos tira 50 mangos para apoyarla en los actos. Todos estos que nos acusan de estas actitudes, me atrevería a decir que votaron a Carrio, que fue la otra candidata que mas votos saco, A los votantes de Elisa Carrio les pregunto algo ¿por que están en contra de las retenciones a la producción agropecuaria? Se olvidan que Elisa Carrio en su plataforma política establece lo siguiente; En consecuencia, la aplicación de retenciones a las exportaciones debe subordinarse al objetivo general señalado, por lo que deberán ser previsibles y móviles. Ahí va el link para que no crean que se los invento http://www.pjn.gov.ar/cne/secelec/document/plataformas/652-1-(Microsoft%20Word%20-%202%20Coa.pdf esta en la Pág. 80 en el punto 5 de la plataforma política de la coalición cívica libertadora (había necesidad de ponerle libertadora). Ósea votaron en materia económica a favor de las retenciones móviles y hoy 6 meses después se ponen en contra.
¿Es una cuestión de retenciones si o retenciones no? Creo que no, el problema es que la presidenta es peronista en su máxima expresión, eso es la molestia de las clases medias argentinas que no hacen otra cosa de que insultar a la presidenta acusándola de montonera, guerrillera y de llegar a insultos de totalmente machistas desde mujeres como por ejemplo mal cogida, puta, atorranta, es algo que cuesta mucho entender.
El frente para la victoria saco un 45 % de los votos y Elisa Cario un 30 y pico , no recuerdo bien los porcentajes pero pudo llegar a decir que entre Cristina y Carrio las dos juntas llegaron a un 70% o mas de los votos. Ósea el 70 por ciento de los argentinos votaron dos plataformas políticas que proponían retenciones móviles ¿Por qué 6 meses después las clases medias argentinas hacen cacerolazos para que se quiten las retenciones móviles y festejan la decisión contradictoria de un vicepresidente?
CAÑUETO MATIAS